30 de septiembre de 2014

Sobre Windows 8 y una opinión positivamente evolutiva

Por Player 1, columnista invitado

El PC quiere ser un tablet

La interfaz Metro comienza con un menú personalizable

Para mi primera entrada escribiré sobre Windows 8. Cuando hace casi 2 años salió hacia el público el entonces nuevo sistema operativo de Microsoft, Windows 8, recuerdo una opinión generalizada sobre lo malo que era. En ese entonces, hice caso omiso de toda esa opinión generalizada y por el contrario, quise probarlo. Me pareció interesante la interfaz de inicio, muy fluida y al menos en diseño, muy atractiva con sus tiles de colores varios (o "ventanillas", aquellos recuadritos que abren cada aplicación o programa y que además despliegan en algunos casos alguna animación). Sin embargo, probé Windows 8 y terminé uniéndome a la opinión generalizada que existía. El sistema operativo era errático, tenía poca compatibilidad y la famosa pantallita de inicio con tiles pasó de ser la principal atracción, a ser mi mayor molestia. Extrañaba mi menú inicio y las formas de acceder a cada sección de la configuración de mi PC. Lo terminé desinstalando para volver a Windows 7 como todo humano común y corriente.

Hace 2 semanas fue mi cumpleaños y con todos los saludos y la buena onda, me llegó un regalo por parte de mis padres, un flamante Lenovo Z410, un notebook nuevo de muy buenas prestaciones...... pero con Windows 8.1 como sistema operativo. Pero las ansias fueron más fuertes y simplemente me dediqué a usar esta versión de Windows sin preocuparme por cambiarlo primero. Hoy creo que fue la mejor decisión y que en el momento anterior, no supe apreciar lo bueno de Windows 8. Así que en esta oportunidad, los llamo a no odiar su Windows 8, si es que lo tienen, y a sacarle el máximo provecho posible.

Windows 8 es un SO que se creó para lograr unificar el mundo que se asomaba con fuerza y que ya se encuentra establecido, el de las interfaces touch popularizadas a través de iOS y del impecable Android, y el mundo del computador y su interfaz de ratón y teclado. No se logró el objetivo en un 100% pero creo que muchas cosas buenas quedaron de esta interfaz doble. Partiré hablando de lo mas llamativo, la interfaz principal, Metro.

Interfaz Metro... touch... pero no tan touch

La primera interfaz disponible al usuario se llama Metro. Metro UI tiene una fluidez impecable y consta de varias partes. La pantalla principal de tiles en la que puedes anclar lo que tu quieras, sea un programa de Windows o una aplicación de su tienda de apps tipo tablet. Es el mejor método para mezclar ambas cosas y depende mucho de la atención y cuidado que el usuario le ponga. Todo, de verdad, TODO, desde configuraciones personalizadas, notas rápidas, hasta aplicaciones tablet. La pueden ordenar como quieran y los animo a que en algunos casos prefieran aplicaciones de la tienda tipo tablet, como correo (alias Outlook) y Facebook. La ventaja de las tiles es que funcionan en segundo plano. Si tu PC tiene una buena cantidad de memoria RAM no tendrás problemas con la interfaz. Muchas tiles despliegan información importante, como una vista previa de los correos que recibas, o las notificaciones o mensajes y su respectiva vista previa en la tile de Facebook. Eso sirve mucho, en aplicaciones como Twitter, da mucha celeridad e incluso las tiles funcionan cuando no estás en la pantalla Metro. Por ejemplo, he estado trabajando en unos apuntes y mi polola, @la_papio, me manda un mensaje privado por facebook. He apreciado mucho, que aparezca una pequeña notificación en la esquina superior izquierda, que me advierta de eso. Funciona incluso con algunos juegos y de verdad me ha sido muy útil

Es algo complejo acostumbrarse a los menús emergentes de Windows 8. Cuando lo tienes en un desktop es mucho mas difícil. En lo personal, con el panel táctil de mi notebook, ha sido fácil. En el panel táctil, si yo hago un swype (en la jerga, un swype es deslizar el dedo a través de la pantalla touch o del panel en este caso) desde la punta derecha hacia la izquierda, se despliega un menú lateral desde el cual puedo controlar distintas cosas de manera rápida, como las opciones de cada aplicación, un mini panel de control, dispositivos externos y es el método idóneo además para apagar el PC. Ojo a eso, ya que es una de las principales críticas del recién llegado que, en muchos casos, ha llegado a simplemente forzar el apagado a través del botón de encendido. Lo que me gusta de este menú lateral es su primer ícono, “Buscar” y es buenísimo: me permite buscar lo que sea que haya en el pc e incluso en la red a través del cada vez mejor bing. Si hago un swype desde la izquierda hacia la derecha, el PC hace un cambio rápido entre las interfaces y las aplicaciones que estén funcionando. No es tan útil, pero al menos funciona y a ratos hace todo más rápido si es que no eres muy asiduo a tener todo abierto en la misma pantalla.

Además, Metro tiene un listado de aplicaciones estilo menú inicio que se ve de ésta forma. Al lado derecho tiene el menú desplegable.

Y finalmente la segunda interfaz es la de escritorio. Es más simple y menos completa que la de otras versiones de Windows. Es el típico escritorio con accesos directos que todo el mundo adora. Yo también lo adoro y es la interfaz con la que casi todos hemos crecido, aquella nacida con el primer Apple Macintosh o Windows 3.1.1 (nadie sabe quien la comenzó en verdad) y que fue perfeccionada con creces en Windows 95.

¿Lo nuevo es siempre mejor?

Me cuesta imaginar computadores sin el mismo modelo de interfaz, lo que es bueno, para la universalidad de los recursos informáticos, pero creo que es pésimo para el tema de la innovación. Microsoft con Windows 8 da un paso adelante en este asunto de innovar y si lo sigue perfeccionando, al mismo tiempo que mantiene sus (polémicas) relaciones comerciales, puede dar mucho que hablar, puede comenzar algo realmente nuevo. Yo después de estudiar a fondo el sistema, apoyo a Microsoft en este impulso y los animo a que empiecen a “re descubrir” lo nuevo que se ofrece. Por otro lado, se aceptan todo tipo de críticas a esta opinión y no duden en consultar lo que quieran. Este artículo es válido para Windows 8 y Windows 8.1, tanto de PC como de Tablets, entre las que se encuentra la conveniente Toshiba Encore. No confundir con Windows Phone ni con el fallido Windows 8 RT.



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