El difícil camino

A veces los problemas nos quiebran, nos destrozan, nos hunden en una situación interminable, y nos deprimen hasta querer dejarlo todo. Las crisis , las situaciones molestas, y otras cosas parecidas, llegan, y en ese momento sólo preguntamos por qué.

A veces es difícil entender por qué las cosas pasan, por qué no pasan, y por qué ocurren de una manera inesperada. Sobre todo cuando esperamos algo hace tiempo, lo idealizamos, lo queremos, y se transforma en algo irreal que queremos hacer terrenal.
Las personas nos decepcionan, no actúan como esperamos, y nos cuesta ponernos en su lugar. A veces no tenemos en cuenta los factores externos e internos que nos impulsan a actuar, y más difícil es aplicar eso al mirar a los demás.
Frente a tragedias, crisis, problemas, frustraciones, qué más que dejarse caer un rato. A veces ese bajón anímico es dulce medicina, el llorar a veces ayuda, nos limpia. Pero no debemos dejar que esa sea la solución. El prolongar los sentimientos negativos, ese bajón anímico nos bloquea y no deja que superemos la crisis.
Es verdad que a veces no se puede pensar durante ciertas ocasiones que nos dejan mal, pero luego hay que hacer el esfuerzo, por nosotros mismos. Y es ahí en donde surge el sentido de tal devastador momento.
El análisis del por qué, la introspección, la evaluación, el volvernos sobre nosotros mismos y sobre las situaciones molestas, es la verdadera auto-terapia.
En momentos así, un replanteamiento del todo podrá abrir las puertas a uno mejor. Es volver a querernos, replantearnos metas, desvalorizar el idealismo roto, volver a construir uno sobre cimientos más fuertes, volver a creer en lo que somos, lo que queremos, y hacia dónde vamos.
A veces los sucesos nos ciegan momentáneamente, nos exprimen y nos debilitan. Y no logramos ver así la oportunidad de análisis que nos da.
No debemos darnos por vencidos, lo que queremos existe, y cuando en el camino caemos, nos levantamos y seguimos, "poniendo más atención en el camino", para no tropezar de nuevo, para darnos cuenta de dónde estamos, hacia dónde vamos, y contemplar un buen rato el lugar que nos rodea .

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